TRES








Soy Tres
Nací en la calle y desde pequeño la vida me puso a prueba. Un día, mientras buscaba comida para sobrevivir, un señor me disparó en la patita. Nunca entendí por qué me lastimó… yo solo quería comer.
Desde entonces, vivo en la calle, con solo tres patitas, pero con un corazón enorme. Me dan de comer en una escuela en Santo Domingo Agua Zarca, Hidalgo, y estoy muy agradecido. Sin embargo, no es fácil vivir así: el frío, el dolor y la soledad a veces pesan.
Soy cariñoso, convivo muy bien con perros, gatos y niños. Me encanta estar con otros perritos, jugar y dar amor. Siempre he soñado con una familia que me quiera, me cuide y me dé una vida más fácil.
Si no puedes adoptarme, me ayudarías muchísimo compartiendo mi historia. Tal vez, gracias a ti, esa familia por fin me encuentre