MILO
Milo es un perrito talla mediana-chica que lleva mucho tiempo esperando una familia y esta es su historia.
A finales de noviembre de 2021, el fundador de un refugio fue contactado por dos mujeres que necesitaban ayuda, pues habían estado intentando capturar sin éxito a un perrito que se había criado solo en un terreno baldío de Olivar de los Padres, en el suroeste de la Ciudad de México. El perrito había crecido en estado salvaje, durmiendo bajo la lluvia y en la total intemperie. Ellas lo alimentaban. Nadie sabía cómo había llegado ahí, no había mamá, no había hermanos.
El fundador y las mujeres intentaron capturarlo durante un par de días, pero fallaron. Entonces contactaron a un experto que finalmente logró hacerse con el perrito. Lo nombraron Milo.
Desde entonces, Milo ha vivido en el refugio, en la perrera 10. Todos los días desayuna a las 9 y cena a las 5, para después pasar una hora jugando con otros perritos rescatados.
Milo es un perrito tímido, que necesita mucha paciencia y compromiso, una familia prudente que literalmente lo enseñe a confiar. Su adaptación será lenta. Ha mejorado muchísimo desde que llegó, al principio no se dejaba ni agarrar, pero sigue siendo un perrito muy particular. Necesita un jardín y una familia sin niños, puros adultos, con experiencia en perros y con la determinación real de ayudar, de ser héroes para Milo.
Por lo demás, es un perrito que ha aprendido a socializar con otros perros a lo largo de los meses. Juega muy bien con Linda, que se ha vuelto su mejor amiga. Se emociona mucho cuando va a comer, brinca como canguro. Es un excelente guardián, siempre atento, y es muy agradecido.
Merece una familia donde lo cuiden mucho y le permitan confiar, ir avanzando a su ritmo, sin prisas.
Tiene protocolo de salud completo: está esterilizado, vacunado y desparasitado.
Dar hogar a Milo es una misión de amor.
¿Crees que eres esa persona especial que Milo necesita?